El exceso de peso puede ser una gran complicación para quienes busquen un embarazo. Las complicaciones obstétricas pueden ser dos a tres veces superiores en mujeres obesas, como por ejemplo diabetes gestacional y presión alta durante el embarazo. Además, el riesgo de aborto y muerte fetal se encuentra aumentado en relación a embarazadas con peso normal. Asimismo, para aquellas que tengan bajo peso, el panorama tampoco es positivo: puede tener menores tasas de éxito tras métodos de Reproducción Asistida y se ha asociado a complicaciones obstétricas como parto prematuro y bajo peso al nacer del recién nacido.

“Lo ideal para comenzar un tratamiento de Reproducción Asistida es estar normopeso, lo que quiere decir, un índice de masa corporal entre 18,5 y 24,9 kg/m2. Este índice se puede calcular fácilmente dividiendo el peso por la talla al cuadrado”, explica la Dra. Rose Marie Meier, médica especialista de Reproducción Asistida en IVI Santiago.

El sobrepeso es un problema de gran magnitud hoy en día. De hecho, según el último informe sobre alimentación y nutrición de la Organización Mundial de la Salud junto a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Chile lidera el índice de obesidad en mujeres en Sudamérica. En éste se indica que un 32,8% de las mujeres mayores de 18 años tiene obesidad o sobrepeso, en tanto, los hombres adultos, que ocupan el segundo lugar en la región, tienen un porcentaje que llega al 24,8%.

Por ello, los expertos en salud recomiendan una dieta balanceada y ejercicios. “Lo ideal para bajar de peso es hacer ejercicio y seguir una dieta equilibrada y prolongada en el tiempo para que los resultados sean efectivos, duraderos y saludables para nuestro organismo”, afirma la Dra. Rose Marie Meier.

Han aparecido dietas “milagrosas” que son practicadas sobre todo durante el periodo estival. El problema de este tipo de dietas es que la mayoría no cuenta con un respaldo científico por el cual funcionen y muchas de éstas no son equilibradas en cuanto a los nutrientes aportados.

El ABC de las vitaminas

En esta línea, se recomienda seguir una dieta variada compuesta por:

  • Vitamina A: la falta de ésta desarrollaría la degeneración y la caída del número de espermatozoides. La mejor manera de ingerirla es consumir alimentos con su precursor, Caroteno.
  • Vitamina B: su deficiencia podría conducir a un exceso de estrógeno, lo que dificulta la fertilidad.
  • Vitamina C: mejoraría la inmunidad, la calidad del semen y es importante para la salud ovocitaria de la mujer, lo que ayuda a reducir el riesgo de infertilidad en ambos sexos. Las frutas cítricas son ricas en antioxidantes por lo que podrían disminuir el impacto de las hormonas producidas por el estrés, lo que puede dificultar la erección en el varón.
  • Vitamina D: Esta vitamina que conseguimos a través de la exposición al sol (con moderación) mejoraría la acción de la secreción de insulina, la ovulación y ayudaría a aumentar la probabilidad de embarazo después de la Fecundación In Vitro.
  • Semillas y frutos secos: contienen grasas saludables y nutrientes como el zinc, selenio y la vitamina E que podrían ser importantes en la producción de hormonas sexuales y espermatozoides.
  • Fibra: retarda la absorción de azúcares en el intestino, impidiendo un gran aumento de la insulina después de una comida. La recomendación es de unos 25 gramos por día.

¿Cómo afecta la obesidad en la calidad seminal?

“La obesidad puede afectar la reproducción masculina desde varios puntos de vista. Por un lado, se puede afectar la calidad seminal, al disminuir el volumen del eyaculado, disminuir la concentración espermática y la motilidad de los espermios. Además, por un aumento de la temperatura escrotal se puede producir daño a nivel del ADN espermático”, aclara el doctor Troncoso.

Agrega que la obesidad se asocia a una mayor prevalencia de disfunción eréctil y a una disminución del deseo sexual, lo que se explica por una disminución de la testosterona circulante. “Es importante señalar que estas alteraciones de pueden mejorar bajando de peso y mejorando el estilo de vida”, puntualiza.