En la actualidad, los divorcios son más frecuentes que hasta hace un par de años y es precisamente porque, si no hay acuerdos ni puntos en común, las parejas deciden deshacer inmediatamente una relación que no cumplió las expectativas iniciales. No obstante, varias personas piensan que no todo está perdido y aunque fruto de esa relación haya nacido un hijo, se dan una segunda oportunidad en el amor, donde en muchas ocasiones la nueva familia queda conformada por los “tuyos, los míos y los nuestros”.

El psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra, explica que “además de construir una nueva historia, es un desafío que, tanto el hombre como la mujer, se deben permitir cuando planean la construcción de un nuevo futuro, y vale la pena vivirlo cuando se conjugan todas las variables que se necesitan para comenzar esta nueva relación”.

Una familia ensamblada requiere de mucha dedicación y generosidad, ya que no se trata solamente de amor pasional entre la pareja. El especialista sostiene que este concepto de familia nace de un acto de amor, en el sentido más amplio del término, porque implica entregar afecto de manera voluntaria, con el propósito de encontrar un equilibrio y sin duda, la felicidad.

La llegada de un hijo en común

Una vez conformada la nueva familia, es posible que los padres decidan ampliar el núcleo, lo que sin duda es un acontecimiento donde deben estar involucrados todos los integrantes. El psicólogo Fernando Marchant, indica que esta puede ser una gran oportunidad para fortalecer la convivencia y estrechar los vínculos afectivos. “El nuevo integrante será el hermano en común de él o los hijos que ya son parte de esta nueva reconstrucción familiar, por lo que es esencial hacerlos partícipes del proceso completo, incluso si son adolescentes y más aún si son pequeños”, advierte el especialista.

En este contexto, los adultos que ejercen el rol de padres, serán los responsables de invitarlos a unirse al proceso previo y posterior, como la preparación del dormitorio, elección de la ropa o incluso el nombre. “Esto ayudará a que los hijos comprendan la importancia de tener hermanos, además de hacerlos sentir parte de las decisiones de la familia”.

El psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra, Fernando Marchant, entrega algunos consejos para llevar una relación de pareja saludable y en armonía:

  •  Respeta la figura de la ex pareja: Evita hacer críticas sobre el padre o madre de los niños, más aún si están ellos presentes. Tu actitud debe ser conciliadora, fomentando la comunicación.
  •  Mantener expectativas realistas desde el principio: La adaptación es un proceso que requiere de tiempo y constancia.
  •  Demuestra tu amor abiertamente: A los hijos les hará bien saber que su madre o padre es amado.
  •  Respeta la relación entre tú pareja y sus hijos: no intervengas en las decisiones sobre la crianza de los niños que ya acordaron previamente los padres.
  •  Actúa con delicadeza: Si vas a imponer normas, debes hacerlo de manera cuidadosa, pero con firmeza. Lo importante es que te respeten y validen al momento de emitir tu opinión.
  •  Como adulto, tu misión es facilitar el paso a esta nueva etapa: La reconstrucción de una nueva familia implica disposición y actitud positiva, evitando el conflicto.