Cuando se nos viene a la mente la palabra sanar solemos pensar en nuestro cuerpo, en una herida o enfermedad. Sin embargo, el término va más allá de lo físico. ¿Qué pasa cuando tenemos que sanar nuestras emociones, nuestra mente o corazón? A primera vista parece más difícil, pues no bastan los fármacos, sobre todo si la herida se produjo por una situación tan traumática como el abuso.
Rosalie B. Kahn es una escritora y sanadora estadounidense radicada en Chile, en Algarrobo, desde 1989. En su tercer libro, «Mi corazón sanador», relata de manera íntima y sencilla su transformación tras haber sufrido abuso sexual en su infancia y cómo, tras recuperarse, empezó a sanar a otros.
El viaje al que nos invita es conducido por su propia experiencia aplicando las enseñanzas de reconocidos maestros espirituales como Edgar Cayce y Louis Hay, entre otros. A la fecha ha ayudado a muchas personas a superar enfermedades graves y a lidiar con el estrés que implica vivir en estos tiempos de cambios, siendo conocida en distintas ciudades del mundo por ser una fuente para el bienestar y la plenitud. Ella sabe, por su propia experiencia y estudios, lo importante que es tener un corazón sano para estar completos como seres humanos.
Su historia
Rosalie siempre ha sido una persona sensible. El abuso sexual a temprana edad y la nula contención de su familia la hizo buscar un refugio propio, y ese fue la escritura. Siempre conectada con sacar de su alma sus sentimientos y reflexiones, empezó a escribir poesía y diarios de vida desde pequeña. Fueron estos los primeros atisbos de su necesidad de sanar. En 1977 ingresó al Servicio Exterior de Estados Unidos y vivió en distintos países, en los cuales fue desarrollando —de manera paralela a su trabajo— un camino potente de crecimiento personal, no exento de dolores y dificultades.
[irp posts=»1451″ name=»9 medidas para prevenir el abuso sexual en niños»]
Sonríe Mamá & Familia conversó con Rosalie para conocer cómo la impactó el abuso, sacar lecciones y herramientas que nos ayuden a sanar nuestras propias tribulaciones y sufrimientos.
¿Cómo fue la situación de abuso que viviste siendo niña?
Vivir con el abuso de niña fue muy difícil. Viví con un miedo tremendo a diario y guardé profundos y oscuros secretos de todos a mi alrededor. Pasé mucho tiempo sola y lloré, sin entender lo que estaba pasando. El ir a dormir me costaba mucho por temor.
¿Qué recuerdas de ese tiempo en cuanto a tu relación con el mundo?
Recuerdo sentir que no encajaba en el mundo. Me sentía diferente de todos los demás y no podía hablar de cómo estaba sufriendo y viviendo. Pensaba que se notaba el abuso. Recurrí a la comida para consolarme y tener problemas de sobrepeso cuando era niña agravó la situación.
¿Cómo y cuándo lograste salir de esta etapa?
Cuando tenía 17 años comencé a trabajar y conocí a una joven maravillosa de mi edad. Nos hicimos muy buenas amigas. Adria me ayudó a hablar sobre el abuso. Pude confiar en ella y hablar fue el primer paso en la curación.
¿Cuáles fueron las transformaciones que viviste para sanarte?
Experimenté alegría en lugar de tristeza. Pude aprender a ayudar a los demás una vez que comencé el proceso de curación hacia mí misma y tuve la libertad de hablar sobre lo que me había sucedido de niña. Todas estas cosas me ayudaron a convertirme en la persona que debía ser en este mundo y a servir a los demás.
De acuerdo a tu propia experiencia, ¿qué perjuicios causa el abuso en niños?
Hay efectos dañinos de larga duración cuando los niños son abusados. El niño maltratado ve el mundo a través de filtros. Por ejemplo, si eres una niña de 14 años, tu primer beso debe ser hermoso e inocente. Cuando abusan de un niño se pierde esa experiencia encantadora y es reemplazada por el miedo. Naturalmente, las relaciones futuras están en riesgo si la curación no ha tenido lugar. Hay tremendos problemas psicológicos que sobrevienen. El niño puede hacerse daño a sí mismo debido a la frustración y el dolor. En mi caso, mis instintos naturales de ser una niña feliz se mezclaron con gran tristeza y miedo. Anhelaba el amor, pero fue difícil de alcanzarlo durante muchos años. Tenía mucha desconfianza y temor a los hombres.
¿Qué mensajes le entregarías a los niños, de cara a la prevención?
La prevención tiene más que ver con los adultos que rodean a los niños. Sin embargo, lo que me gustaría decir a todos los niños es que, sin temor, deberían estar conscientes de lo que sucede a su alrededor. Nunca vayan solos con alguien que no conozcan, sin importar lo que diga la persona. Si alguien te toca de manera inapropiada, informa de inmediato la experiencia a un adulto de confianza. Hay que alejarse de la situación y nunca sentir que uno tiene la culpa. Eres un niño, no tengas miedo de decirle a alguien. Si no te creen o no hacen nada, díselo a alguien más.
¿Y qué les dirías a los adultos que pueden estar cerca de una situación así?
En primer lugar los adultos deben tener una comunicación abierta con sus hijos, aunque este tipo de tema es tabú en muchas familias chilenas. Hay que hacerles saber qué es el contacto inapropiado de parte de los adultos o incluso de otros niños. Si un niño acude a ti diciéndote que ha sido víctima de abuso, actúa de inmediato. Cree en el niño, protégelo. Ese es el trabajo principal de cada padre. Sé consciente de las personas que rodean a tu hijo: usa tu intuición. Como padres debemos saber qué está pasando con nuestros hijos. El niño maltratado necesitará ayuda. Asegúrate de que le permitas hablar. Pide ayuda a un profesional y asegúrate de que nunca más se le permita al niño estar con la persona. Lo más importante es que tu hijo entienda que estás ahí para protegerlo siempre y que no hay nada que pueda decir que te haga enojar. Muéstrale al niño que lo amas. Eso es lo más importante.
[irp posts=»4417″ name=»Los riesgos psicológicos del ciberacoso»]
Dónde buscar ayuda
Si deseas conocer más detalles del trabajo sanador de Rosalie ingresa en www.rosaliebkahn.cl
Fono Niños 147: Es un servicio telefónico gratuito y confidencial de Carabineros de Chile creado como una instancia preventiva de orientación y apoyo especialmente dirigida a menores de edad que sean víctimas de amenazas o vulneración de sus derechos.
Fundación para la Confianza: Si necesitas ayuda o tienes dudas acerca de si hay o no abuso sexual en una determinada situación puedes contactar a esta fundación a través del fono +56226735483 o el email [email protected]