Frente a ello, el psiquiatra y director médico del Hospital de Día MirAndes en Santiago, Dr. José Miguel Sepúlveda, explica la importancia de atender este tipo de diagnóstico de forma oportuna.
“En general, cualquier situación excepcional o de crisis podría provocar o aumentar la sintomatología de algún cuadro de salud mental. Por este motivo, en el contexto actual de confinamiento sí puede verse aumentada la sintomatología desde un cuadro de depresión”, afirma.
La imposibilidad de socializar
Consultado sobre los riesgos de desatender un cuadro depresivo en estos momentos, el especialista detalla que en caso de no acceder al debido tratamiento se corre el peligro de generar una “agudización de los síntomas, reaparición de síntomas en remisión (o que ya estaban superados), una merma en la calidad de vida, y la mantención del malestar, entre otros”.
El especialista explica que la socialización es uno de los factores protectores que deben fortalecerse en este tipo de casos. Sin embargo, en este contexto es aún más dificultoso.
“Cuando damos indicaciones para manejar los cuadros de depresión se incentiva la búsqueda de factores protectores, tales como socializar o buscar apoyo con redes cercanas, entre otras. En este contexto no siempre es posible recurrir a ellos. Por lo que podrían presentarse nuevamente algunos síntomas”, explica el profesional.
Hospitalización diurna
En la modalidad de Hospital de Día, que ofrece MirAndes a sus usuarios, el énfasis del tratamiento se hace desde la salud mental comunitaria, fomentando espacios de socialización con otras personas que comparten la experiencia de tener un diagnóstico psiquiátrico. Y en contexto de pandemia esto no ha sido la excepción.
Precisamente, MirAndes ha trabajado en garantizar estos espacios de integración comunitaria en formato virtual, amplificando la red de socialización de sus usuarios. Lo que es sumamente valioso en términos terapéuticos.
Para ello, se valen de talleres grupales que apoyan el tratamiento de terapia psicológica. En general, los efectos a largo plazo son altamente exitosos ya que, a diferencia de un tratamiento ambulatorio, el estar con otros permite una reintegración a los roles productivos y/o funcionales mucho más rápida.
“Es cierto que en estas condiciones es un desafío, pero en nuestra experiencia en MirAndes la hospitalización diurna puede ser una excelente alternativa para quienes cuentan con escasas fuentes de socialización”, indica.