Como mamás debemos tener en cuenta que nuestros bebés utilizan el pecho por muchas más razones que para comer: para inducir el sueño, para relajarse, para consolarse, para regalonear, entre otras. Por lo mismo, a veces el destete puede volverse algo difícil.
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Una de las estrategias que puede ayudarnos a iniciar la etapa del destete es identificar las tomas que nuestros bebés hacen al pecho y clasificarlas. Esto nos permitirá, posteriormente, reemplazar la toma y así ofrecer a nuestro bebé lo que realmente necesita.
Por ejemplo, si identificamos que nuestro bebé nos pide el pecho porque tiene hambre, entonces ofrecemos un alimento atractivo y de su gusto. Si se acerca a nuestro pecho porque tiene sueño el alimento no será bien recibido, porque estará utilizando el pecho para inducir el sueño y no para comer. Ahora, ¿cómo podemos identificar cada toma?
Tomas alimenticias
- Se caracterizan por ser tomas con succiones largas e intensas, se escucha cómo el bebé traga. La mandíbula baja y sube.
- Por lo general, una vez satisfecho, suelta el pecho o pasa a una succión más corta y rápida, llamada succión no nutritiva.
Tomas de regaloneo o para inducir el sueño
- Se caracterizan por comenzar con succiones cortas y rápidas.
- Son tomas “interminables” y cuando intentas sacar el pecho se despiertan o irritan.
Tomas de consuelo
- Cuando el bebé pasa algún mal rato, un susto o se pega en alguna zona de su cuerpo, el mayor consuelo es el pecho.
Ten en cuenta que será casi imposible identificar todas y cada una de las tomas de tu bebé al pecho. Pero si logras identificar algunas ya podemos comenzar a reemplazarlas por lo que el bebé necesita y así caminar hacia un buen destete.
Integrar nuevos sabores
Reemplazar nuestra leche no es tarea fácil y su reemplazo dependerá de la edad de nuestro bebé: recordemos que hasta los 12 meses la leche es el principal alimento.
Acá van algunos tips que pueden servirnos para que los bebés acepten gradualmente el sabor a la fórmula:
- Utiliza la cuchara: Algunos bebés no aceptan fácilmente la mamadera y la cuchara es una excelente aliada, ya que les entrega poco volumen en boca y es más fácil para ellos.
- Comienza dándole 3-4 cucharadas de leche materna y luego 1 de fórmula. En caso de que no la acepte continúa dándole cucharaditas de leche materna e inténtalo nuevamente más tarde. Si la acepta, repite este ejercicio y aumenta gradualmente las cucharaditas de fórmula.
- Apoya este proceso con juegos, bailes, burbujas, canciones. A través del juego y la diversión es más fácil para ellos.
Por: Paulina Campos, enfermera y asesora de lactancia. Creadora de Bendita Lactancia @blactancia
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