Niños zurdos: lo que debes saber
Muchas cosas se han dicho de los zurdos hace décadas atrás. Por ejemplo, en los años 60 se relacionaba esta característica con la dislexia, así como también existía la costumbre de atar hacia la espalda la mano izquierda de niños propensos a escribir con esa mano.
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¿Pero qué significa ser zurdo? En el cerebro existen dos hemisferios, derecho e izquierdo, que dirigen en forma cruzada la motricidad y las funciones del hemicuerpo izquierdo y derecho. En las personas diestras su hemisferio cerebral dominante es el izquierdo y en las personas zurdas el hemisferio cerebral dominante es el derecho. Esta lateralidad o preferencia en el uso de la mano izquierda se observa también para el ojo, oído y pie. Conversamos con Cecilia Peñafiel, Directora de la Escuela de Educación Diferencial de Universidad de Las Américas (UDLA), para responder algunas dudas comunes que los padres pueden tener sus hijos zurdos. De acuerdo con los estadios del desarrollo psicomotor de los niños y las acciones asociadas a cada uno de ellos es posible comenzar a observar la lateralidad predominante. Es así que al ver acciones como tomar los cubiertos para comer o patear un balón se puede apreciar la lateralidad dominante a partir de los 24 meses aproximadamente. Al comenzar la escolaridad está predominancia comienza a ser más evidente y puede ser confirmada alrededor de los 5 años, con el inicio de ejercicios de lectoescritura y otras actividades del ámbito educativo. Los estudios indican que alrededor de un 10% de la población mundial es zurda. También que existe un número mayor de hombres que mujeres zurdas. Hasta el momento no hay acuerdo total sobre el origen de esta característica en las personas, existiendo diversas teorías. Una de las más difundidas sobre la predisposición hacia la dominancia lateral izquierda se vincula a un origen genético, combinado con factores ambientales. Si bien existe mucha información en la literatura respecto a distinciones positivas de las personas zurdas, la más significativa se vincula a la capacidad de adaptación, ya que se desarrollan habilidades para desenvolverse adecuadamente en un mundo preparado para personas diestras. También se destaca la facilidad de quienes son zurdos para ciertos deportes (tenis, fútbol). Las desventajas se asocian principalmente a que, dado que la mayoría de la población es diestra, el entorno está preparado para personas con dominancia física derecha. Es por ello que, por ejemplo, la utilización de ciertos implementos deben ser adaptados para el uso de personas zurdas (pupitres, tijeras, etc.). [irp posts=»8511″ name=»5 actividades para potenciar la motricidad fina»] Las implicancias se vinculan, por un lado, a la utilización de algunos útiles y mobiliario escolar y, por otro lado, al aprendizaje de la lectoescritura. Por lo anterior, se pueden tomar algunas medidas básicas en beneficio de la inclusión de niños y niñas en el sistema escolar: En ningún caso es conveniente forzar al niño a cambiar su lateralidad, ya que puede generar dificultades a nivel de autoestima, aprendizaje y en la ejecución de tareas cotidianas. Al forzar un cambio en la lateralidad que naturalmente es predominante en él se envía —de manera implícita— el mensaje que hay algo en él que no es adecuado. Por otro lado, el forzar a realizar actividades con la mano de menor dominancia generará mayor dificultad en la realización de esas tareas, ocasionando más cansancio y frustración, lo que sin duda impactará el proceso de aprendizaje. En primer lugar, los padres deben comprender que la dominancia lateral de un niño no tiene una connotación positiva o negativa. Por tanto, deben eliminar sus propios prejuicios respecto a esta característica para evitar transmitirlos a sus hijos. También existen ciertas acciones que pueden realizarse para “facilitar” la vida de los niños zurdos. Por ejemplo, contar en el hogar con implementos adecuados para potenciar la motricidad de los niños (tijeras, lápices triangulares, cuadernos, etc.) y tomarse el tiempo para practicar con su hijo las cosas que pueden generar mayor dificultad, como atarse los zapatos. A nivel escolar conviene informar en el establecimiento educativo la sospecha de la dominancia lateral izquierda con la finalidad que se tenga en consideración al momento de trabajar la lectoescritura y se cuente con los materiales idóneos para su desarrollo. Por último, evitar centrarse solo en aspectos vinculados a su dominancia lateral, siendo necesario potenciar las capacidades del niño o niña en distintas áreas, especialmente a través del juego, para lograr un desarrollo sano y armónico. [irp posts=»5302″ name=»Cómo apoyar a un hijo con disgrafía»]
Los avances médicos han servido para aceptar el hecho de ser zurdo como una característica normal de ciertas personas. El problema es que el mundo está hecho para diestros, por lo que igualmente encuentran dificultades en el diario vivir.
¿A partir de cuándo se manifiesta si un niño es zurdo?
¿Existen condiciones que predispongan a que un niño sea zurdo?
¿Existen ventajas asociadas al hecho de ser zurdo?
¿Y en cuanto a las desventajas?
¿A nivel escolar qué implicancias tiene?
¿Es bueno que los padres fuercen a sus hijos para que no sean zurdos?
¿Qué recomendaciones se pueden dar a los padres de niños zurdos?