Una encuesta gubernamental descubrió que en Japón unas 541.000 personas viven totalmente aisladas. Pero muchos expertos creen que la cifra total es mucho más alta, pues a veces tardan años en pedir ayuda. De acuerdo con lo anterior toma protagonismo el llamado síndrome Hikikomori, que significa “apartarse o estar recluido de forma voluntaria”.
Hikikomori corresponde a un término japonés para referirse al fenómeno social en que las personas escogen apartarse y abandonar la vida social, buscando grados extremos de aislamiento y de confinamiento.
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Hiperconexión
El síndrome Hikikomori aparece en un mundo cada vez más hiperconectado y conducido por el estrés, en el que la gran mayoría vive permanentemente en torno a las redes sociales, los likes, los correos electrónicos o los videojuegos. Una vida moderna inmersa en un mundo conectado a la que cada vez se apuntan más personas en todo el mundo.
Hay quienes, lejos de reflejar esa conexión en la vida real, deciden retirarse de todo contacto social y dejar de relacionarse. Es ahí cuando la televisión, el móvil, el computador o los videojuegos se convierten en la única referencia de estas personas, también conocidas como Hikikomori.
Un problema cada vez más común en la sociedad moderna que hasta hace poco tiempo se relacionaba únicamente con Japón, pero que en los últimos años se ha extendido a otros países como Estados Unidos, Italia, Francia o incluso España. El trastorno afecta hoy a más de un millón de personas solo en Japón y sobre todo a los más jóvenes.
5 síntomas del síndrome de Hikikomori
- Aislamiento social que lleva habitualmente a permanecer la mayor parte del tiempo en casa y en la habitación o incluso a encerrarse con llave dentro de ella.
- Rechazo de acudir a cualquier actividad laboral, académica o social.
- Baja autoestima y personalidad depresiva.
- Insomnio y horarios alterados, que les hacen ser más activos durante la noche.
- Abandono del cuidado personal y de hábitos saludables como hacer ejercicio o comer de forma saludable.
¿Cómo tratarlo?
Una de las bases del tratamiento psicológico del síndrome de Hikikomori trata de forzar la ruptura del aislamiento, ofreciendo alternativas sociales que puedan resultar de interés para el niño, joven o adulto. Al mismo tiempo se inicia un tratamiento psicológico adecuado para dejar de lado la ansiedad social, que suele ser común en los afectados.
Una recuperación en la que tanto la terapia psicológica como las familias tienen un papel relevante, ya que además de ser las principales detectoras de este trastorno, también serán las encargadas de ofrecer apoyo y acompañamiento necesario, facilitando la comprensión, la aceptación de este síndrome y su tratamiento para poco a poco ayudar a recuperar las habilidades sociales de la persona.
Por: CETEP
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