¿Qué sucede con tu piel en el embarazo?
Durante el embarazo se generan múltiples cambios endocrinos, vasculares, metabólicos e inmunológicos. Es un estado único y particular donde cada mujer reacciona en forma diferente. Tal como hay mujeres que se sienten muy bien, animadas y energéticas, hay otras que presentan náuseas, decaimiento, sueño y cansancio. Estas diferencias también se manifiestan en la piel.
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Durante este período algunas pacientes presentan mejoría de su patología cutánea de base y otras empeoran. Así vemos mujeres que sufren de acné y durante el embarazo mejoran significativamente, y otras pasan de una piel lisa a un exceso de seborrea y aparición de acné en rostro y tronco. Respecto a las alergias, no se ha documentado un aumento significativo de ellas en este período. Sin embargo, por todos los cambios que se producen se sugiere ser estrictas en la humectación cutánea para mantener la integridad de la barrera cutánea, evitar jabones abrasivos y detergentes irritantes. En este período, en especial durante el primer trimestre, se sugiere evitar tratamientos que no tienen evidencia de seguridad materno fetal y que no son de extrema necesidad, como la depilación láser, uso de retinoides tópicos, uso de ciertos despigmentantes (hidroquinona) y medicamentos tópicos no indicados por el médico. La idea es disminuir al máximo los riesgos. En general, los productos de uso tópico tienen baja absorción sistémica y son relativamente seguros. Pero si no son estrictamente necesarios es mejor evitar su uso a menos que sean indicados por el dermatólogo o ginecólogo. Dentro de los cambios fisiológicos que sufre la piel en el embarazo están las alteraciones de pigmentación, estrías, cambios glandulares, vasculares, alteraciones del pelo y uñas, prurito, y edema, entre otros. Veamos en detalle cada uno de ellos: Ocurre en el 90% de las embarazadas, es más frecuente en pezones, línea nigra y en los propios nevi (lunares) y efélides (pecas). Un grupo de pacientes presentarán aumento de la pigmentación localizada en pómulos, mentón y/o frente, lo que se denomina melasma o cloasma del embarazo. Para prevenirlo se debe usar fotoprotección activa: uso de sombrero, lentes de sol, evitar la exposición solar, uso de fotoprotectores con SPF 30 o superior en abundante cantidad y reaplicarlo cada 3 horas. Todas estas medidas deben hacerse en forma precoz, ya que una vez que el melasma se desarrolló su tratamiento es difícil, tiende a ser recidivante y se debe hacer posparto. Se presentan en abdomen, mamas, muslos y otras zonas del cuerpo. Se inician como líneas rosado-violáceas, en ocasiones pruriginosas, que luego evolucionan a bandas deprimidas blancas. Su causas son multifactoriales, inducidas por la tensión cutánea, aumento de actividad corticoadrenal y una predisposición genética. No hay tratamientos 100% efectivos para prevenirlas. Se sugiere mantener la piel bien humectada y el uso de aceites o cremas preventivas. Luego del parto se pueden usar tratamientos específicos tanto tópicos como laser u otros, con resultados parciales. El prurito o picazón es una de las causas de mayor incomodidad en el embarazo. Se manifiesta de manera difusa, persistente y progresiva. En alguna ocasiones es provocado por las sales biliares circulantes aumentadas, pero muchas veces su causa es desconocida y mejora con el parto. Para el manejo se sugiere uso de emolientes suaves que mantengan la integridad de la barrera cutánea, evitar gatillantes como jabones abrasivos, detergentes de ropa muy fuertes, telas sintéticas o lanas, entre otros. En algunos casos se pueden usar antihistamínicos y corticoides tópicos de baja potencia. Se producen debido al aumento de flujo sanguíneo, disminución del retorno venoso y aumento de niveles hormonales. Los más frecuentes son las arañas vasculares, várices, puntos rubí, eritema palmar y gingivitis. No hay forma de prevenirlos, pero muchas veces desaparecen a los pocos meses de posparto. En caso de persistir se puede realizar laser vascular en la mayoría de los casos. Hay que dar un tiempo de recuperación, ya que en ocasiones demora algunos meses en revertirse. Por: Dra. Carla Muñoz Olate. Dermatóloga. @dra.carlamunoz_dermatologa [irp posts=»12083″ name=»Cuando el sistema nervioso afecta nuestra piel»]
Existen enfermedades cutáneas específicas del embarazo que se conocen como dermatosis del embarazo. Es importante conocerlas y diagnosticarlas precozmente, ya que algunas podrían generar restricción del crecimiento intrauterino del feto y riesgo materno fetal. Mientras que otras solo causan molestias sin riesgo de daño a la madre o al hijo.
Patologías de base
Cuidado con ciertos tratamientos
Cómo enfrentar los cambios
1-Hiperpigmentación
2-Estrías de distensión
3-Picazón
4-Cambios vasculares