Claves para disfrutar la infancia de tus hijos
Para educar en el respeto, primero tienes que respetar a tus hijos. Cuando escuchas sus preferencias, opiniones y necesidades no solo estás respetando al niño, sino que también estás creando comunicación y un buen desarrollo del lenguaje; esto permitirá tener una conexión familiar más afianzada.
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A continuación encontrarás algunos consejos para hacer esto realidad. Pon especial atención en los acuerdos que hagas con tus hijos y asegúrate de que se llevan a cabo. Si no cumples con tus promesas, el niño dejará de confiar en ti. De esta forma le estás mostrando el camino para ser una persona comprometida. De esta manera lo único que le estás enseñando es a decir mentiras. Si tiene dudas sobre algún tema o te pregunta algo, trata de resolverlo de la manera más cercana y transparente posible, sin tapujos. Que no existan los temas tabú entre tu hijo y tú. Utiliza un lenguaje lo más adaptado posible a su edad, pero siempre real. Si tratas bien a los demás estás enseñando a tu hijo a hacer lo mismo. Trata siempre con respeto al niño. Esto no significa que le demos carta blanca para hacer lo que quiera en cada momento. Es necesario poner límites y normas, pero siempre dejando a un lado la autoridad. Dale las gracias y pídele las cosas por favor y sobre todo pídele perdón cuando sea necesario. A los niños se les obliga mucho a decir esas tres palabras, pero la reciben poco. Antes de dormir, es un momento perfecto para poder hablar y disculparse, hacer un análisis del día, conversar sobre los conflictos que hayan podido haber, etc. Tanto el lenguaje verbal como el no verbal es imprescindible en la educación de los niños. Busca las palabras adecuadas, ya que es importante para que le llegue el mensaje que queremos ofrecerle de la mejor manera. Tener un lenguaje asertivo con tu hijo le enseña a defender su opinión desde el respeto. Darle valor a lo que el niño quiere decir en cada momento es importante. Toma en cuenta sus opiniones y sus gustos ya que no tienen por qué ser iguales que los tuyos. Tu hijo es una persona diferente a ti y por lo tanto tiene otros gustos y otros puntos de vista distintos. Tú eres el que finalmente tomará las decisiones, pero no olvides valorar y escuchar el criterio de los demás. “Ahora están hablando los mayores” es una frase a la que recurre el adulto cuando el niño interrumpe una conversación. Darle prioridad al niño es esencial, ya que cuando quiere decir algo, que siempre será importante a sus ojos, si no le hacemos caso en el momento, el mensaje que le estamos dando es que lo que tiene que decirnos no vale la pena escucharlo. El adulto con el que estás entablando conversación comprenderá perfectamente que le des prioridad a tu hijo y que le atiendas. Sin embargo, no debemos olvidar enseñarle a respetar los turnos y a tener paciencia. Recuerda que respeto no es sinónimo de permisividad. El adulto tiene que poner límites, siempre de forma amable, con coherencia y claridad. Es nuestra responsabilidad como adultos guiar y acompañar al niño. Por ejemplo, hacer alguna actividad especial en Navidad o hacer una viaje todos juntos en verano. Crea asambleas familiares para expresar y exponer temas que quieran compartir. En definitiva, disfruta de tiempo de calidad con tus hijos. Los niños necesitan pasar tiempo con el adulto, buscar momentos en el día como contar un cuento, un juego de mesa, planes en familia los fines de semana, etc. Las experiencias enriquecen y dotan de un gran aprendizaje tanto a niños como a adultos. Hazle saber a diario que le amas, que es especial y único para ti, que disfrutas de su compañía. Los niños son muy literales; no basta con sentirlo, deben escucharlo. Mientras estés con tu hijo disfrutando de una actividad o de un juego, deja el móvil en modo avión. Por: Carmen Prieto Ribó. Neuroeducadora y autora del libro «No me grites, abrázame» (Editorial Saralejandría). Especialista en comportamiento infantil y juego en la Primera Infancia. Cofundadora de Ubuntu, Asociación Española de Crianza Respetuosa y Consciente. Instagram: @carmenprieto_crianza [irp posts=»15763″ name=»¿Es bueno obligar a los niños a saludar con besos?»]
Disfruta esta etapa tan maravillosa de tus hijos llamada infancia. Ríete, juega, deja que te hagan cosquillas, cuenta cuentos, disfrázate con ellos, rueden por el suelo, acampen en el living, etc. La idea es que tu hijo vea que te encanta estar con él.
Acuerdos
No le mientas
Predicar con el ejemplo
Cuida tus palabras
Saber escuchar
Prioridad
Límites
Crea tradiciones familiares
Amor
Fuera teléfonos