Es muy importante que los padres o familiares a cargo de niños estén muy pendientes de las actividades que realizan en casa, sobre todo ahora que permanecen todo el día, y todos los días, al interior de los hogares. La ida es evitar accidentes domésticos para no tener que acudir a unidades de urgencias, que por estos días están enfocadas en la atención del Covid-19.
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Rodrigo Beltrán —director de carrera de kinesiología UDLA Sede Viña del Mar y diplomado en neurokinesiología pediátrica y en salud mental perinatal, comenta que los niños en casa pueden verse expuestos a peligros que generan lesiones de distinta gravedad o efectos negativos para su salud, como caídas,
golpes, lesiones traumatológicas, cortes, electrocución, entre otros. Por ello, es muy importante que sus cuidadores tomen medidas que eviten estos accidentes, considerando acciones que van desde las más simples, como la educación, hasta las complejas como intervenciones estructurales.
Accidentes más comunes
El académico menciona que entre los accidentes más frecuentes que pueden tener los niños en sus hogares están las caídas (desde camas, muebles, árboles, bicicletas y scooter), electrocución, ahogamiento, quemaduras, golpes en muebles, cortes con vidrios, entre otros.
“Los niños y niñas entre los 10 y 18 meses, cuando inician sus primeros pasos, comienzan a descubrir el entorno del hogar, por ende, son los que sufren mayor cantidad de lesiones. En este grupo, las causas de mayor frecuencia son las caídas, quemaduras y envenenamiento”, dice el kinesiólogo.
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Buenas ideas
- Enseñar a los niños a tener cuidado con el ejemplo.
- Explicarles lo que es peligroso, lo que no es y el porqué.
- Hablarles sobre lo que se puede hacer en casa, lo que no se puede hacer y el porqué.
- Repetir las explicaciones las veces que sea necesario.
- Recordar los consejos cuando se les olvide.
- Reforzar la comprensión de los niños y niñas de las situaciones peligrosas.
- Acompañar en todo momento las actividades de los niños y niñas bajo su responsabilidad.
- Evaluar cuál es la disposición más apropiada de los muebles en casa, para evitar golpes en puntas y caídas. Idealmente, separarlos y arrinconarlos dejando libres espacios para transitar y jugar.
- Enseñar que la cama es un lugar para dormir, por lo que saltar y jugar en ella puede ser peligroso.
- Usar protectores de muebles (esquinas), cierres o topes especiales para sus puertas, disponibles en el comercio.
- Usar en todos los enchufes protectores para evitar electrocución.
- Cocinar en quemadores posteriores de la cocina. Esta, a su vez, debe estar empotrada a la pared.
- Utilizar los envases originales de elementos de limpieza y de alta toxicidad, y dejarlos fuera del alcance de los niños.
- Hervidores eléctricos deben estar en altura con contención correcta, evitando posibles derrames de agua hervida.
- Las estufas deben estar en zonas que no sean de alto tránsito, con protección y lejos de los lugares en que los niños frecuentan
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