Tras el aumento de casos de virus respiratorios en Chile, es importante considerar aquel primer síntoma que surge en un resfriado: la mucosidad nasal. Y es que poner atención en el color y la consistencia de la mucosidad puede ser una ayuda para saber si es una simple alergia o un cuadro infeccioso al que prestarle mayor atención y cuidados.
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Si bien la mucosidad es algo que protege al organismo de patógenos externos, esta se compone en su mayoría por agua (96%) y el porcentaje faltante por proteínas y sales que actúan como defensa para el organismo.
La mucosidad también es un signo de alerta inicial, especialmente en aquellos niños que asisten al jardín o sala cuna donde comparten juguetes y, por ende, virus. La mayoría de las infecciones virales entran por la nariz, siendo los mocos la primera señal.
Por su parte, la textura y el color indican que el sistema de defensas está actuando y los glóbulos blancos están luchando contra posibles patógenos o infecciones.
De transparente a roja
La Dra. Lenny Cruzat, broncopulmonar pediátrica de Clínica Las Condes, detalla que “tener mucosidad no es un indicador exacto sobre la salud de nuestros hijos, porque puede ir desde una alergia hasta una infección viral y/o bacteriana. Por ello es muy importante tener claridad respecto a qué otros síntomas acompañan”.
Respecto al color, puede ser un factor relevante de detallar en la consulta médica. Toma nota de esto:
- Trasparente: Es indicador de un moco normal, que forma parte de la respuesta inmune y actúa como filtro transparente.
- Blanco: Cuando la mucosidad es blanca y más espesa quiere decir que el organismo está activando sus mecanismos de defensa (glóbulos blancos, anticuerpos). Se presenta usualmente en caso de virus. Sin embargo, cuando estos se vuelven purulentos (que tienen pus) es necesario consultar con un especialista por si es un cuadro más complejo.
- Verde: Este color se presenta cuando las defensas están protegiendo y luchando contra el virus y/o bacterias acumulando muchas sustancias, lo que no quiere decir que el paciente necesite antibióticos ya que puede ser solo un resfrío común.
- Amarillo: Surge comúnmente en infecciones virales, sin embargo, siempre es a raíz de un mecanismo de defensa donde se acumulan sustancias dando origen al cambio de color.
- Café: Cuando la mucosidad es de este color puede indicar que el sistema inmune está luchando contra virus o bacterias y la infección abarca algo más que un simple resfriado. Frente a esto siempre hay que consultar con un especialista.
- Negro: Puede ser a raíz de contaminación o presencia de hongos.
- Rojo: Surge por la presencia de sangre, especialmente en los capilares de la nariz, tras limpiarse demasiado o con mucha intensidad.
¿Cuándo preocuparse?
De acuerdo con la doctora, cuando las secreciones son amarillentas o purulentas, sobre todo si se acompañan de otros síntomas como fiebre o dolor al respirar.
“Los aseos nasales son una buena práctica para mejorar la sintomatología. Sin embargo, si la mucosidad está asociada a fiebre, decaimiento, y pese al aseo nasal es difícil respirar bien, es necesario consultar con un especialista”, detalla la Dra. Cruzat.
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