Los últimos días del año suelen ser intensos y, en muchos casos, estresantes: compras de regalos, organización de eventos y cierre de ciclos, entre otras actividades. No obstante, estas fiestas de fin de año también nos ofrecen una oportunidad única como padres, madres y cuidadores para generar y/o fortalecer vínculos con nuestros hijos.
Leer artículo completo