Según la última edición del informe “Radiografía Digital”, 81% de los menores entre los 8 y 10 años disponen de un teléfono móvil propio, mientras que entre los jóvenes de 13 y 17 años un 96% señaló poseer uno. Estas cifras resaltan la necesidad de abordar los desafíos de la crianza en la era tecnológica.
Desarrollo cognitivo
Fernando Marchant, psicólogo de Vidaintegra, señala que el uso excesivo de dispositivos electrónicos puede afectar negativamente el desarrollo cognitivo de los niños. “La entrega temprana y sin restricción parental del acceso tecnológico y las redes es un riesgo que puede afectar en su normal desarrollo. En el futuro pueden verse limitados en:
- Habilidades sociales
- Desarrollo de la empatía
- Resolución de problemas
De acuerdo con el psicólogo, estas tres consecuencias surgen al estar más en un mundo personal de encierro y de falta de oportunidades para enfrentar la diversidad de escenarios y perspectivas.
Respecto al rol de los padres, Marchant sostiene que la mayoría recurre a esta modalidad para descansar y entretener a sus hijos. Sin embargo, advierte que “el cerebro de los menores necesita estimulación, pero debe ser dosificada y bien dirigida por los adultos. De lo contrario, se satura la mente y es contraproducente al verdadero aprendizaje significativo. Es necesaria, pero con inteligencia, con reglas, normas y límites. Por ejemplo, estableciendo horarios definitivos y restringiendo páginas y temáticas de riesgo para los menores”.
Límites
Asimismo, Jennifer Conejero, psicóloga infantojuvenil de Clínica Santa María, enfatiza la importancia de establecer límites claros en el uso de la tecnología y fomentar un equilibrio saludable en la vida digital de los niños. Para esto recomienda:
- Limitar el tiempo de pantalla
- Promover actividades al aire libre
- Fomentar la lectura y el juego creativo
“Es importante que los padres entiendan, como parte de la crianza, que a los niños les hace bien aburrirse, porque fomenta la creatividad y el pensamiento. Los adultos tienen que dar el ejemplo, no pueden estar en la mesa con el celular revisando el chat, tiene que haber un modelo a seguir”, comenta la especialista.
Autocontrol
Por su parte, Claudia Badilla, psicóloga de la Clínica Ciudad del Mar, señala que “el abuso de redes sociales muestra un patrón de comportamiento en el que la persona presta atención y destina más tiempo que el deseado en esta actividad, viendo limitada su capacidad de autocontrol, generando cierta dependencia que afecta el desempeño en distintas áreas de actividad, ya sea personal, familiar o laboral”.
Recomendaciones para padres
Los especialistas entregan estas recomendaciones para desincentivar el uso de la tecnología en menores:
- Fomentar el deporte y los talleres extracurriculares. Esto, además de mantener a los niños desconectados, les permitirá compartir con amigos y desarrollar habilidades sociales.
- Establecer horarios fijos. Lo ideal: potenciando el buen dormir. Por ejemplo, dejar el celular de lado dos horas antes de ir a acostarse.
- Incentivar actividades familiares que no requieren usos tecnológicos, como dar paseos, salir al aire libre, juegos de mesa y lecturas.
Fuente: Clínica Ciudad del Mar.