Piel del adulto: cuidados y recomendaciones
A medida que pasan los años, la piel va cambiando y necesitando más atención. En los adultos es frecuente ver condiciones de alergias, dermatitis peribucal en mujeres, rosácea e hipersensibilidad. También se observan ciertas patologías exacerbadas en periodos de estrés, como ocurrió en el periodo de pandemia donde aumentaron los casos de psoriasis, reacciones alérgicas y acné.
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Debemos aclarar que una piel sana se ve bien, pareja, luminosa y no brillante. Además, su textura es suave y no presenta manchas por exposición solar excesiva. De acuerdo con la dermatóloga, muchas personas llegan a la consulta queriendo saber su tipo de piel. Pero esta clasificación —seca, mixta, grasa o normal— resulta un poco artificial. «Decir que una persona tiene tal o cual tipo de piel no es algo tan categórico. Lo cierto es que en la etapa adulta uno pasa por distintos periodos. Si la persona está en un ambiente seco va a tener la piel más seca, y si va a un lugar húmedo sentirá que es menos seca», sostiene. Para la doctora, lo más importante es saber interpretar cómo está la piel en determinado momento y teniendo eso como base elegir los productos adecuados. «Hoy me puede servir una crema y en dos años más ya no, porque me cambié de ciudad. Por otra parte, cuando una persona consulta por una patología, rosácea por ejemplo, tampoco se le puede decir usted tiene tal o cual piel porque en ese momento solo es una piel con rosácea y puede tener zonas más secas que otras. En tal caso, los productos a escoger tendrán que ver con su condición de rosácea», explica. Es importante consultar al dermatólogo una vez al año como una forma de prevención. En esa misma revisión se pueden ver las condiciones cutáneas de la persona para decidir el tipo de crema a usar. Porque igual es importante elegir adecuadamente. «Si yo tengo piel grasa y uso una crema para piel seca voy a saturarla, la voy a ver brillante, pegote y poco luminosa. Es cuando la gente dice ‘se me corta la crema’, cuando se hacen grumitos. Eso indica que el producto no es adecuado, pues no logra absorberse», explica. Cabe hacer mención respecto a las llamadas pieles sensibles. Son aquellas que tienen una hiper-respuesta o intolerancia a elementos externos en contacto, como maquillaje, lociones, ropa o detergentes. La Dra. Muñoz señala que se reconoce por ser una piel roja, irritada, que arde, que pica o que puede tener algunos granitos. La clave es mejorar la barrera cutánea prefiriendo productos pensados para pieles sensibles (limpiadores suaves, detergentes hipoalergénicos, emolientes sin mucho color o perfume). [irp posts=»7279″ name=»¿Se puede usar el bloqueador solar del año pasado?»] La Dra. Muñoz explica que si la persona consume alcohol habitualmente esto afectará su piel, mientras que el tabaco también daña muchísimo. Además de todos los cánceres asociados, el tabaco produce una vasoconstricción, es decir, hace que los vasos se aprieten y que la sangre no llegue adecuadamente a zonas terminales como punta nasal, labios, orejas o puntas de dedos. El tabaco hace que a nuestra piel le llegue menos flujo de sangre, lo que se traduce en más arrugas y opacidad, y menor calidad. «Después del sol, el tabaco es lo más dañino para la piel», sentencia. La calidad o el tipo de agua presente en el lugar donde vivimos también afecta la piel. El agua de Santiago o del norte del país es muy dura y, por ende, mucho más irritante. Ante esto, las personas deben aplicar más humectante a su piel. Otro punto importante es prestar atención a la forma en que tratamos la piel a diario. Hay personas que al bañarse usan de manera frecuente guantes muy duros (exfoliantes) o se pasan el jabón de manera muy enérgica al punto de dejar la piel enrojecida. La doctora explica que la piel debe tratarse con cariño y aclara el uso de guantes para exfoliar: «Esto puede servir cuando la piel está muy engrosada y deseo eliminar la capa córnea que por una alteración no está en niveles adecuados. Pero si tengo una piel normal no es necesario. En caso de requerirlo, se pueden usar estos guantes dos veces por semana como máximo». Independiente del tipo de piel, todas las personas adultas debiesen seguir esta rutina diaria: A lo mencionado arriba, que es lo básico, le puedo agregar cremas de tratamiento específico, contorno de ojos, para manchas, etc. [irp posts=»11586″ name=»Piel: ¿cuáles son las manchas más comunes en el rostro?»]
La dermatóloga Dra. Carla Muñoz (Instagram: @dra.carlamunoz_dermatologa) explica que en Chile no tenemos una patología única que se escape en frecuencia respecto de otras, como ocurre en Australia con el cáncer de piel. Lo que sí sucede en nuestro país, específicamente en Santiago, es que al ser una ciudad con clima seco se pueden ver numerosos casos de pieles secas con patologías asociadas a ello.
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